Reparación de una puerta acorazada que cuelga
¿Tu puerta está reforzada y cuelga? ¿Notas que tu puerta acorazada se traba cuando la abres y quieres cerrarla? ¡No dejes que este problema continúe, a riesgo de que la situación empeore y te encuentres un día en la puerta de tu hogar sin poder regresar!
Diferentes razones explican por qué una puerta cuelga
Ninguna puerta es infalible y cualquier equipo puede, de la noche a la mañana o con el tiempo, mostrar signos de mal funcionamiento. Hay varias razones por las que una puerta cuelga:
- Esto puede provenir de la cerradura y no de la puerta en sí,
- Los pernos de anclaje de su cerradura no encajan bien en el marco de su puerta,
- Un espacio en la puerta requiere un reajuste,
- Las bisagras deben actuar como un nuevo ajuste,
- El peso de su puerta es muy pesado y el marco necesita ser reforzado,
- Se debe instalar una barra de pivote para enderezar la hoja,
- Las bisagras deben ser reemplazadas,
- Las bisagras necesitan ser reemplazadas por completo…
Un cerrajero profesional interviene y te ayuda
En primer lugar, el reparador realizará un diagnóstico in situ para ofrecerle un presupuesto detallado. Posteriormente, este último reparará el elemento causante del mal funcionamiento de su hoja.
Eventualmente volverá a equilibrar las fijaciones, las levantará con arandelas de fricción si es necesario, o tendrá que desquiciarlas por completo. También se le puede pedir que desmonte el cerradero o que intervenga en el marco, según la complejidad de su puerta acorazada.